Carl Diem en su libro sobre la Historia del deporte (1968) nos dice que “el deporte moderno tan solo cuenta con medio siglo de existencia y en ese tiempo ha conquistado el mundo, se ha convertido en una realidad que no se puede ignorar”.
En Málaga, el deporte se empieza a manifestar de forma espontánea a principios del siglo XX como un elemento de relación entre personas para ocupar su tiempo de ocio. La vocación de ciudad abierta y cosmopolita hace que penetre con facilidad esta nueva cultura de influencia anglosajona.
Tendríamos que esperar hasta la segunda mitad del siglo pasado para disfrutar de las primeras instalaciones deportivas, como fue la emblemática Ciudad Deportiva de Carranque, que empiezan a regular su práctica. Hasta entonces, sus calles y plazas, el puerto, el parque y cualquier otro espacio abierto eran válidos para su desarrollo.
Hoy en día Málaga goza de las mejores condiciones para practicar deporte. Se han construido grandes complejos, palacios y estadios, lo que permite que cualquier malagueño pueda realizar una variedad muy diversa de modalidades deportivas. El clima también favorece que se sigan tomando las calles y paseos para correr o montar en bicicleta de forma placentera y saludable.
El deporte en Málaga es una realidad en nuestra cultura que nadie puede ignorar, incidiendo de forma clara sobre la educación, la salud, el turismo o la economía, pero sobre todo en nuestro estilo de vida. El deporte ha conquistado a Málaga.
Pedro Montiel Gámez y
Carlos Serra Castañeda