La Opinión de Málaga es un periódico diario español que se publica en Málaga desde 1999, perteneciente al grupo Editorial Prensa Ibérica. Se enfoca principalmente en noticias locales de la ciudad, su área metropolitana y municipios cercanos.
Radio Nacional de España (RNE) es la división de la Radiotelevisión Española que se encarga de la gestión directa del servicio público de radiodifusión nacional en España. Opera seis emisoras de radio: cuatro que abarcan todo el territorio nacional; Ràdio 4, que se sintoniza únicamente en Cataluña, y Radio Exterior de España, disponible para el resto del mundo, que emite, además de en las lenguas cooficiales españolas, en portugués, francés, inglés y judeoespañol.
Por su parte, Radio Nacional (también abreviada como RNE) es la emisora generalista pública de Radio Nacional de España. Es la cuarta emisora de radio generalista más escuchada del país, con 847 000 oyentes, según la segunda oleada del Estudio general de medios de 2024. Se puede sintonizar a través de la radio AM, radio FM, televisión digital terrestre, transmisión digital de audio, internet y aplicación para dispositivos móviles. [Fuente: Radio Nacional de España. (2025-10-16). Wikipedia.]
El cine Astoria abrió sus puertas el 20 de enero de 1966 en la plaza de la Merced con la película My Fair Lady. El musical se proyectó en versión original con subtítulos. Fue una función benéfica cuya recaudación se destinó al hospital de la Cruz Roja. Las entradas del patio costaban 30 pesetas y las del anfiteatro 25.
Diseñado por el arquitecto Juan Jaúregui, el cine tuvo un diseño funcional, pero supo explotar los últimos avances en exhibición, aforo y equipos de proyección. El Astoria fue el vértice principal del triángulo cinematográfico de la plaza de la Merced con los otros cines de esta cadena familiar, el Andalucía y el decano Victoria, que formaban una suerte de Gran Vía malagueña que enlazaba con el vecino Albéniz de Alcazabilla. La familia Moreno vendió en 1984 el Astoria y el resto de cines de su circuito a la empresa Mendivil, propietaria del América Multicines, por 180 millones de pesetas. En su segunda etapa, el cine siguió manteniendo su caché, aunque los nuevos multisalas de los 90 lo fueron arrinconando hasta que cerró en 2004. [Fuente: Griñán, Francisco. (2019-09-06). El cine Astoria: de su inauguración en 1966 hasta su próxima demolición. Sur Historia.]
El derribo de los edificios que albergaban los cines Astoria y Victoria se produjo en 2019.
Diplomático y hombre de negocios.
Hijo del cónsul mexicano José Smerdou Bosich, el 1 de enero de 1931 —por retiro de su padre— Porfirio Smerdou fue nombrado cónsul honorario de México con jurisdicción en Andalucía Oriental y Protectorado español de Marruecos.
Durante los siguientes años, el joven cónsul se dedicó a fomentar la imagen y el turismo de su país.
Debido a estos esfuerzos, el Gobierno mexicano le premió, el 1 de enero de 1936, con su nombramiento oficial como vicecónsul de carrera al tiempo que le mantenía el consulado honorífico.
Al estallar la Guerra Civil, Porfirio Smerdou realizó una amplia labor humanitaria salvando la vida de numerosas personas amenazadas de muerte por la represión republicana: a 150 las albergó en su propia casa Villa Maya —sede del consulado mexicano—, logrando evacuar desde el puerto de Málaga hasta un total de 567 hombres, mujeres y niños con destino Gibraltar o Marruecos.
El 19 de diciembre siguiente fue cesado de su cargo por el Gobierno mexicano, pero mantuvo la bandera y su gestión protectora hasta la entrada de las fuerzas nacionales en Málaga el 8 de febrero de 1937. A partir de entonces, se dedicó a proteger a republicanos de la represión franquista —con ayuda del cónsul italiano T. Bianchi.
Fernando Jiménez, socio de Carlos Lamothe Rivas en la Bodega Jiménez y Lamothe (1879-1918).
Abuelo del periodista malagueño Guillermo Jiménez Smerdou, quien en una entrevista realizada por la Asociación de la Prensa de Málaga en 2024 explica la pérdida de las Bodegas Jiménez y Lamothe. "Para construir la gran bodega en Manzanares, solicitaron un préstamo al banco de los Larios de 2.000.000 de pesetas que tenía que ser pagado en oro o plata. Iban pagando de forma puntual, pero el estallido de la Primera Guerra Mundial impidió conseguir oro ni plata en ningún lugar de Europa, y los Larios se quedaron con las bodegas Jiménez y Lamothe. Era el año 1917. [Fuente: entrevista realizada a Guillermo Jiménez Smerdeu].
Las bodegas «Jiménez Lamothe», prestigiosa firma de la Málaga del XIX, tuvo su origen en una empresa de exportación de vinos creada en 1852 por Prosper Dominique Lamothe Bernasquet (1816-1900?). Con el negocio ya en manos de sus hijos, Prosper y Carlos Lamothe Rivas, se crearían las famosas bodegas, «Jiménez y Lamothe», con sede en la perchelera calle Constancia, cuyas instalaciones llegaron a ser conocidas a nivel internacional y visitadas en 1904 por Alfonso XIII.
Carlos Lamothe Rivas junto con Fernando Jiménez fundaron las destilerías Jiménez y Lamothe, cuna de las posteriores Bodegas de la Casa Larios, y aunque no fue su único negocio, ni el más próspero, a la postre sí el que le ha dado más renombre. Curiosamente la fundación tuvo lugar en 1880 cuando había comenzado la filoxera y no tuvo que irles tan mal pues al poco tiempo ampliarían y se trasladaron a Calle Constancia. También, y al igual que muchos ilustres vinateros de la época, abrieron bodegas en Manzanares buscando vides sanas y aprovechando el modernísimo ferrocarril que entraba en la misma bodega. Esta mayor producción permitió la exportación, sobre todo hacia América.
Sus bodegas eran un ejemplo industrial, con el lagar de Benefique en los Montes de Málaga, y la destilería de Manzanares. Desde mediado el siglo XIX, fueron pioneros en la elaboración de los brandies, que entonces todavía se llamaban cognacs, de lo que ha llegado hasta nuestros días el universalmente famoso «l866». [Fuente: Información facilitada por Emilio Morales].
Fernando Jiménez es el abuelo del periodista malagueño Guillermo Jiménez Smerdeu. En una entrevista realizada por la Asociación de la Prensa de Málaga explica la pérdida de las bodegas Jiménez y Lamothe. "Para construir la gran bodega en Manzanares, solicitaron un préstamo al banco de los Larios de 2.000.000 de pesetas que tenía que ser pagado en oro o plata. Iban pagando de forma puntual, pero el estallido de la Primera Guerra Mundial impidió conseguir oro ni plata en ningún lugar de Europa, y los Larios se quedaron con las bodegas Jiménez y Lamothe. Era el año 1917. [Fuente: entrevista realizada a Guillermo Jiménez Smerdeu en la Asociación de la Prensa de Málaga].
José María de Sancha y Valverde fue un ingeniero de caminos, arquitecto y pintor español, padre de los artistas Francisco Sancha Lengo y Tomás Sancha Lengo.
Ingeniero de caminos, pertenecía a una familia de origen italiano y realizó importantes proyectos como estudios para la desviación o soterramiento del río Guadalmedina u otros para la mejora urbanística del casco antiguo de Málaga. Es autor de diversos inmuebles en las zonas del paseo del Limonar y La Caleta de Málaga, así como de importantes obras de ingeniería como la traída de aguas de los manantiales de Torremolinos hasta Málaga. Fue impulsor de empresas arriesgadas de minería y construcción e hizo mecenazgo de artistas que le llevaron a la quiebra económica. También se dedicó a la pintura y la literatura publicando en el periódico Las Noticias.
Villa Cele María (Paseo de Sancha, Málaga, España). Obra y residencia de José María de Sancha.
Adivinando el futuro turístico de la Costa del Sol, invirtió su dinero en aquellas tierras, aunque no sacó provecho de ello y, tras perder su patrimonio, ingresó en el Cuerpo de Ingenieros de Vigo, en cuyo puerto realizó algunas obras y donde murió a los cincuenta años; allí, en un mausoleo del cementerio de Pereiró, reposan sus restos. El paseo de Sancha de la ciudad de Málaga fue nombrado así en su memoria. [Fuente: José María de Sancha. (2025-109-25). Wikipedia]
La pieza fue obsequiada a la ciudad por el industrial Tomás Trigueros y Trigueros quien, en diciembre de 1876, ofrecía costearla a sus expensas, con la condición de situarla en las proximidades de su fundición [Fundición Tomás Trigueros (calle Canales, Málaga, España, 1840)] en pleno corazón del barrio del Perchel. [Fuente: Sánchez López, Juan Antonio. (2007). Paseos por la escultura pública de Málaga. SPICUM. Universidad de Málaga.] Fundición Tomás Trigueros (calle Canales, Málaga, España, 1840)
La fundición Ramírez y Pedrosa, fue creada en Málaga el día 24 de mayo de 1916 por Cayetano Ramírez Ballesteros y Rafael Pedrosa García, en la calle Ferrocarril del Puerto nº 4 por dos antiguos maestros de Taller de la histórica fundición malagueña de Tomás Trigueros. Desde sus inicios, se especializó en la construcción de maquinaria de todas clases y en la explotación del negocio del hierro y bronce, así como todo lo concerniente al ramo de la calderería. Destacó en la fabricación de equipos completos para fábricas aceiteras y maquinarias para lagares, muy en consonancia con el auge del sector agroalimentario en aquellas fechas. A partir de 1928, la firma queda en manos de Don Cayetano Ramírez Ballesteros, quien afrontó la nueva etapa especializándose en la forja, construcción y reparación de calderas e instalaciones de vapor. En su última etapa estuvo al frente del negocio José Luis Ramírez Gallego, nieto del fundador. Su actividad cesó en 1998.
Fábrica de construcciones metálicas La Metalúrgica S.A. (Industria Sidero-Metalúrgica, Málaga, España, 1914-?)
Una de las empresas que vino ocupar el vacío dejado por la siderúrgica de Heredia fue la fábrica de construcciones metálicas La Metalúrgica S.A., propiedad de Julio Goux y Aguer, quien invirtió en ésta y otras empresa el importe de un premio de lotería, continuando así en un sector en el que se inició cuando en 1874 abrió la ferretería El Candado. Julio Goux llegó a ser el tercer contribuyente de la provincia de Málaga. La Metalúrgica fue creada en 1914 con un capital nominal de 60.000 ptas. La sede social se hallaba en calle Somera nº. 5, aunque la fábrica se ubicaba a la mediación del Paseo de los Tilos, nº 28. Desde 1918 disponía de un taller mecánico con cuatro tornos que podía manejar piezas de hasta 40 toneladas de peso, así como 15 fraguas dobles. Disponía también de un horno de fundición de bronce. Entre las obras destacadas que se hicieron en esta fábrica se halla el puente de La Aurora (1928-1930), cuyo montaje realizaron operarios de la fábrica, pero también la estructura metálica del Banco de España o edificio domésticos, como uno en calle Cárcer, o la cancela artística de diseño modernista del mercado de Salamanca. También realizó en 1933 los grandes bidones para CAMPSA que hasta no hace muchos años se ubicaban en la calle Ronda Intermedia.
Conocida como Ferrería de Heredia, por el apellido de su fundador Manuel Agustín Heredia, figuró a la cabeza de la producción nacional de hierros durante más de dos décadas (1835-1855). En 1863 contaba con 5 altos hornos, 22 hornos de afino, 6 de recalentado, 9 trenes de cilindros laminadores, talleres de construcción de máquinas, de fabricación de frascos para el mercurio de Almadén, de calderería, de carpintería, etc. En el momento de apogeo llegó a emplear más 800 trabajadores. A mediados de los años sesenta la fábrica entró en declive debido fundamentalmente a los elevados costes del combustible que le impidieron competir con las empresas siderúrgicas del norte peninsular. La tenacidad de los empresarios por mantener una empresa que no era rentable explica que ésta perdurara hasta 1899, fecha en que fue adquirida por un grupo industrial belga (Bonehill) que modernizó sus instalaciones e intentó reflotarla sin éxito. Tras una nueva etapa de actividad en los años de la Primera Guerra Mundial, su cierre definitivo se produjo en 1924.
El 6 de Marzo de 1920 se constituye en Madrid la Compañía Minero Metalúrgica, Los Guindos, S.A., con un capital de 40 millones de pesetas y comienza la construcción de una fundición de plomo argentífero, con el objeto de explotar la Mina “El Guindo” de La Carolina (Jaén), siendo Málaga, en estas playas cercanas al Puerto, el lugar idóneo para el desembarco del combustible que venía de Inglaterra y Alemania, el cual era necesario para su funcionamiento. Su inauguración se produce en 1922, con la asistencia del General Primo de Rivera y las fuerzas vivas de la Ciudad. Sus instalaciones suponen un gran complejo industrial para Málaga, que llegó a tener más de 300 trabajadores y su producción de plomo alcanzó entre 1925 y 1929, 79.800 toneladas y su crecimiento fue constante porque era una época donde el plomo tenía una gran demanda por su aplicación en la construcción, en los automóviles y en la industria nuclear. La aparición de materiales sustitutorios, especialmente el plástico, el cual abarató sensiblemente los precios y el agotamiento de las minas, llevaron al cierre de esta Fábrica, el 15 de Noviembre de 1979.
De los talleres de esta fundición y de sus modernas instalaciones salían, además de hierros y otros metales refundidos, máquinas de vapor, calderas horizontales y verticales, bombas de vapor con acción directa de doble efecto, norias de todos los sistemas, bombas de riego, ruedas hidráulicas y turbinas, prensas hidráulicas de engranajes y de palanca, trituradoras de aceitunas, molinos harineros y de azúcar, columnas, puentes, herrajes para obras, etc. En 1897 ya aparece en los catálogos de la empresa como Ingeniero Industrial, fundidor y constructor de máquinas, calderas de vapor y maquinaria para instalaciones aceiteras. Ese mismo año, patentó la prensa HEATON. Se trata de una prensada de aceite para capachos. En los años veinte eran muy apreciadas las prensas hidráulicas y las batidoras de masa de esta casa ya gozaban de una merecida fama. Según un censo de la propia firma, en el año 1925 nos indica la citada fundición que había llegado a instalar más de 1.500 molinos aceiteros y fábricas de extracción de aceites de orujo y refinerías de aceite, repartidas por las provincias de Córdoba, Sevilla, Jaén y Málaga principalmente.
Desde sus inicios se especializó en la construcción de herramientas, cerrajería y maquinaria de precisión: pesos, balanzas, etc. Por la calidad y finura en sus trabajos recibió distintos premios, entre otros: una Mención honorífica en 1850, en la Exposición Pública celebrada ese año en Madrid. Desde principios de los años setenta del siglo XIX aparece la firma como Tomás Trigueros e Hijo de Málaga, el cual le da un impulso de modernidad especializando el establecimiento en nuevas ramas de la metalúrgica: “fabricación de máquinas de vapor fijas y locomóviles” y principalmente en la “construcción de toda clase de máquinas para la fabricación de azúcares, alcohol, chocolates, fideos… y en la construcción de prensas hidráulicas, de husillo y palanca, molinos trituradores y aparatos para la fabricación de aceite y vino”. Por estos años, se realiza una ampliación del establecimiento hasta ocupar 10.000 metros realizando un amplio surtido principalmente de maquinaria agrícola. En sus últimas décadas de existencia, hasta 1920, gozó de gran prestigio entre los fabricantes del ramo por la calidad de sus prensas y máquinas agrícolas. La demanda constante de sus productos, hacen que continúe con sus trabajos de metalúrgica si bien, tras la gran guerra, no sería capaz de soportar la contracción de la demanda y acabaría cerrando sus puertas.
FERRERÍA LA CONCEPCIÓN - MARBELLA
Ferrería la Concepción
Su origen se remonta a 1826, fecha en que un grupo de comerciantes de Málaga decidieron explotar unas minas de hierro descubiertas cerca de Ojén. Para ello construyeron una fundición en la margen derecha del río Verde, en un paraje próximo a su desembocadura. El combustible se obtuvo de las ricas comarcas forestales situadas al norte de Marbella y la fuerza motriz de la energía hidráulica. Dos personajes destacan en el lanzamiento de la empresa, Manuel Agustín Heredia y Francisco Antonio Elorza, el primero aportando la financiación necesaria y la confianza en el éxito de la iniciativa; el segundo sus conocimientos técnicos. El plan de Elorza consistió en establecer el método de fundición indirecto, consistente en obtener hierro colado en el alto horno utilizando carbón vegetal y después afinarlo en hornos de reverbero con carbón mineral en una nueva ferrería que se construyó en Málaga (La Constancia).
FUNDICIÓN Y TALLERES DIEGO DÍAZ. CONSTRUCCIONES MECÁNICAS - VÉLEZ-MÁLAGA
A comienzos del siglo XX Diego Díaz Montenegro, de familia originaria de Antequera, montó en Vélez-Málaga la empresa familiar de Talleres y Construcciones Mecánicas, situada entre el Camino de Málaga y Arroyo Hondo. La fábrica continuó su funcionamiento con sus hijos Diego y José Díaz Cruces hasta su desmantelamiento en 1990, que no fue definitivo, porque la actividad continuó en manos de un hijo de José, llamado también José Augusto Díaz Gutiérrez, que trasladó el negocio al polígono veleño de La Mata, donde funcionó hasta 2007. La factoría destacó por la fabricación y montaje de maquinaria para fábricas de los sectores del azúcar, el aceite, las conservas, el almacenaje y transporte de combustibles, aparatos de elevación y grúas, generadores de vapor, etc. En el sector aceitero esta empresa montó muchas fábricas modernas por toda la geografía española y renovó su funcionamiento en la comarca de la Axarquía con el montaje de numerosas instalaciones.
FUNDICIÓN DE HIERRO Y TALLERES DE CONSTRUCCIÓN DE M. BERTRÁN DE LIS - ANTEQUERA
E n 1870 Mariano Bertrán de Lis estableció en sociedad la primera fundición de Antequera. Empezó a funcionar con el nombre de Santa Amalia en la ribera del Río de la Villa y cuatro años después se instaló en una parcela del desamortizado convento de Capuchinos. Del avance y prosperidad del establecimiento nos habla la inauguración en sus distintas dependencias de la instalación de alumbrado a través de gas en 1878, recogida con admiración por la prensa de la época. Más admiración causaba su funcionamiento y la fabricación de la nueva tecnología del momento: aventadoras, prensas de diferentes sistemas, calderas, aparatos para fábricas harineras, aparatos para la fabricación de azúcar de caña, bombas centrífugas, motores de vapor, máquinas locomóviles, turbinas, útiles para fábricas de lanas, grúas, etc. A comienzos del siglo XX los problemas de salud obligaron a Mariano Bertrán de Lis a dejar el negocio, momento que aprovechó otro famoso fabricante, Manuel de Luna, para hacerse con las instalaciones.
FUNDICIONES DE HIERRO Y BRONCE MANUEL ALCAIDE - ANTEQUERA
Manuel Alcaide es otro de los grandes metalúrgicos antequeranos del siglo XX, que creó su empresa alrededor del 1897. Desde sus inicios aparece instalada en calle de San Bartolomé, 30. Abarcaba la Fundición de Hierro y Bronce, los Talleres de Calderería y Cerrajería y la Construcción y Reparación de Maquinaria. Tras el fallecimiento de Manuel Alcaide Duplas en 1933, la fábrica pasó a manos de su familia. Es su hijo quien se pone al frente del negocio y así aparece desde entonces en las placas identificativas de la casa y en la publicidad: Hijo de Manuel Alcaide. A partir de estos años se especializa en la instalación completa de fábricas de aceite de oliva y de orujo. La calidad de sus productos gozaba de fama extraordinaria. En la publicidad de las primeras décadas del siglo XX se ofrecen las instalaciones con electricidad y las turbinas. Aparece también un moderno modelo de batidora para obtener mejor calidad del aceite, que a una sola presión deja agotados los orujos, y economía de agua que se reaprovecha. Este establecimiento permaneció en funcionamiento hasta los años 70 del pasado siglo.
TAMESE (Talleres Metálicos Secundaria), emplazada en la actual calle Pacífico, entre las escuelas del Ave María y la fábrica de electricidad San Patricio. Inició su actividad en 1945 con una producción centrada en el equipamiento para industrias petroquímicas, centrales hidroeléctricas y fábricas de cemento, como depósitos y tuberías metálicas...
TAMESE (Talleres Metálicos Secundaria), emplazada en la actual calle Pacífico, entre las escuelas del Ave María y la fábrica de electricidad San Patricio. Inició su actividad en 1945 con una producción centrada en el equipamiento para industrias petroquímicas, centrales hidroeléctricas y fábricas de cemento, como depósitos y tuberías metálicas. A partir de 1977 mejoró su capacidad añadiendo a su producción materiales de gran tamaño para alta mar, como boyas, pilotes de amarre y plataformas, que solían exportarse incluso al extranjero a través del puerto, del que lo separaban tan solo 5 kms. Las construcciones metálicas se podían realizar en hierro, acero, acero inoxidable, aleaciones y acero revestido, con un límite en los 46 mts. de altura y las 100 toneladas de peso. Las instalaciones ocupaban una parcela de 45.000 m2., integrando naves cubiertas y superficies al aire libre, que incluían las cabinas de pintura y 30 máquinas soldadoras, entre automáticas, semiautomáticas y manuales. En su momento de apogeo empleaba una plantilla de 255 trabajadores, entre ellos 15 ingenieros, 42 soldadores y 14 diseñadores. La empresa entró en crisis en la década de los años ochenta del siglo XX, y la mayoría de los trabajadores aceptaron las condiciones de despido de la empresa.
Doña Mariquita abrió el 17 de noviembre de 1942 por el fundador Francisco Villén. Tras 77 años en la céntrica plaza de Uncibay, el popular negocio, punto de encuentro de vecinos y empresarios del Centro, cerró sus puertas a final de mes de marzo de 2019 por la jubilación Fernando, el hijo del fundador. [Fuente: Diario Sur. 2019-03-21].
Por testimonio de Fernando, hijo del fundador Francisco Villén, abrió el 17 de noviembre de 1942. Primero funcionó como lechería, chocolatería, café y bar, según consta en el Boletín Oficial de la Propiedad Industrial de 16 marzo de 1944. Posteriormente, en 1956, se añadió la especialidad de churrería, y en 1988 la de hamburguesería. Cerró definitivamente sus puertas en marzo de 2019. [Fuente: Dónde estabas Málaga. (2025-10-26). Archistórico Málaga. [Grupo de Facebook]
Periodista. Premio Ondas de 1979. Exjefe de Informativos de Radio Nacional de España en Málaga, emisora en la que comenzó a trabajar el 15 de febrero de 1949. Se inició en las ondas transmitiendo la pasión por el cine con el programa ‘Cine invisible’, que junto con ‘Gong’ y ‘Acuarela’ eran los más escuchados en la RNE de la época. Ha sido corresponsal para un gran número de diarios: Ideal, La Vanguardia, Ya, Pueblo, Diario Madrid... El veterano periodista, con más de 75 años de trayectoria, escribe desde hace 12 años la sección Memorias de Málaga, una doble página semanal en La Opinión de Málaga. [Fuente: Guillermo Jiménez Smerdou. La Opinión de Málaga]
Premios y reconocimientos, entre los que destacan:
- Premio Ondas (1979);
- Premio Málaga Costa del Sol de Periodismo
- Premio SOFICO (1973)
- El Cenachero de Oro (1981) como el mejor periodista malagueño del año
- Premio del Colegio de Arquitectos de Málaga (1988)
- 2013 el primer premio de la Asociación de Festivales Audiovisuales de Andalucía como reconocimiento a su destacada trayectoria profesional en favor del cine.
En una entrevista realizada por la Asociación de la Prensa de Málaga a Guillermo Jiménez Smerdeu, explica que la pérdida de las bodegas Jiménez y Lamothe. "Para construir la gran bodega en Manzanares, solicitaron un préstamo al banco de los Larios de 2.000.000 de pesetas que tenía que ser pagado en oro o plata. Iban pagando de forma puntual, pero el estallido de la Primera Guerra Mundial impidió conseguir oro ni plata en ningún lugar de Europa, y los Larios se quedaron con las bodegas Jiménez y Lamothe. Era el año 1917. [Fuente: entrevista realizada a Guillermo Jiménez Smerdeu en la Asociación de la Prensa de Málaga]. (2024).
AF0807__19700300_AR_2221_3979L201-I.jpg